Si con The Cruel Prince quedé enamoradísima de la historia y el mundo de las hadas, ya pueden imaginar cuánto ha crecido mi amor en la escala de la fangirl que vive en mí con este libro.
Ya es algo definitivo, estos libros se han robado mi corazón para no devolverlo.
Amo la historia, amo a Jude, amo a los personajes, amo la magia, amo todo de la trilogía The Folk of the Air, y este libro solo lo ha confirmado.
Con el final de The Cruel Prince presenciamos una completa masacre. Dain, el príncipe hada hermano de Cardan y jefe de Jude, nuestra espía de la Corte de las Sombras; fue asesinado conjuntamente con toda su familia mientras era coronado. El promotor de la masacre, el príncipe Balekin, ideó este plan para convertirse en rey en lugar de su hermano, contando para ello con la ayuda de Madoc, padre adoptivo de Jude.
Lo que no esperaba Balekin era que, al final, quien fuera coronado como rey de la tierra de las hadas fuese Cardan, el hermano a quien siempre torturó. Jude tampoco imaginó eso, algo totalmente justificado considerando lo cruel que fue siempre Cardan con ella.
Sin embargo, el más sorprendido fue el mismo Cardan, quien únicamente ocupó el trono porque Jude lo engañó para que se convirtiera en rey hasta que su hermano pequeño, príncipe Oak y heredero al trono, creciera y pudiese reclamar su papel como rey.
Honestamente ese final sí que me sorprendió, pues juraba que Jude se las ingeniaría para que Oak fuese coronado, pero nunca pensé que ella, voluntariamente, colocaría a su enemigo en el trono. No obstante, su decisión me alivió mucho porque era Balekin, Madoc o Cardan, y supongo que este último sí que era el menor de tres males.
Además, ahora que Jude puede controlar a Cardan, quien verdaderamente gobernaría sería ella a través de él, y ya sabemos que la ambición de Jude por el poder no es fácilmente saciable.
‘’El poder es mucho más fácil de adquirir que de mantener.’’
The Wicked King es una constante lucha por manejar un poder demasiado enorme y desconocido para Jude, es un libro lleno de sorpresas y problemas de la realeza que involucran a toda la tierra de las hadas y que deben ser manejados por un rey cuya voluntad ha sido apagada por quien ahora es su espía y mano derecha, la Senescal Jude, verdadera gobernante de este mundo
Si Jude tenía problemas que solucionar en The Cruel Prince, ellos ni siquiera se comparan con todo lo que debe manejar en este libro. Esta chica ahora es una autoridad importante, por mucho que las miradas despreciables sigan rodeándola. Ahora ella tiene algo que antes no tenía, y que incluso muchas hadas aun no tienen: poder.
El problema es que el poder viene con una fecha límite, porque Cardan aceptó ser ordenado por Jude por un año y un día, y ni un minuto más. Después de ello, se acaba su poder y no hay forma de saber lo que hará Cardan una vez que ella ya no pueda controlarlo.
Si solo ese fuese el único problema de este libro…
El reino del mar está dudando de la capacidad de Cardan para gobernar, y el precio de su lealtad supone una oferta que no le hace mucha gracia a Cardan, quien nunca ha sido bueno aceptando que lo cuestionen, pero mucha menos gracia le hace a Jude, que ya tiene suficientes problemas con Cardan.
Sin embargo, la reina del océano no piensa rendirse fácilmente, aunque eso signifique llevar las cosas un poco lejos…
Me encantó el hecho de que en esta historia podemos conocer más de los personajes. Jude sigue siendo una chica increíblemente fuerte, luchadora y perseverante. Es implacable, no puedo más que repetir cuanto la admiro, cuanto me encanta su personaje.
Es tan autosuficiente. Ella, honestamente, nunca ha necesitado ser salvada. Al final siempre encuentra su camino, siempre se salva a sí misma. Aunque esto es algo triste, si me preguntas, pues indica que Jude es una chica solitaria y desconfiada. No obstante, me encanta que pueda sobrevivir dependiendo más que nada en sí misma.
‘’Me mira con sus ojos del color de la noche, hermoso y terrible al mismo tiempo.
—Por un momento —dice—, me pregunté si no eras tú disparándome.
Le hago una mueca.
—¿Y qué te hizo decidir que no lo era?
Me sonríe.
—Fallaron.’’
Aquí también entendemos un poco más a otros personajes, como Cardan, algo que me hizo mucha falta en el primer libro. Ustedes ya saben que si bien amo la fantasía, soy una boba-cursi-romántica. A mi parecer, toda buena historia debe tener un trasfondo romántico para estar completa.
Esta lo tiene, la atracción entre Cardan y Jude se reveló al final de The Cruel Prince y aquí no hace más que acentuarse. No obstante, siguió sin ser suficiente para mí. Aunque entiendo que es que soy una adicta, me dieron un poquito de su romance y me encontré necesitando más. De todos modos, amé como crece en ellos la atracción y esos sentimientos intensos e inexplicables.
Obviamente me hubiesen encantado más escenas de ambos, más momentos de confesión; pues a veces no me parecía que verdaderamente se conocieran. Sin embargo, estos libros no se enfocan en esos aspectos. Entiendo que la trilogía es la historia de Jude y su papel en este mundo, su capacidad para jugar un juego de poder y todo lo que gana y pierde en el mismo.
Así, este libro explica todos esos pequeños sucesos que atentan contra el poder de Jude en este mundo, y para ello también nos revela más facetas de muchos de sus personajes.
Primero, está el rey Cardan.
‘’—Cuando mi padre me despidió, al principio intenté demostrar que no era nada como lo que él pensaba de mí. Pero cuando eso no funcionó, traté de ser exactamente lo que él creía que era. Si pensaba que yo era malo, sería peor. Si pensaba que yo era cruel, sería horroroso. Viviría de acuerdo con todas sus expectativas. Si no podía tener su favor, entonces tendría su ira.’’
Cada vez puedo entender más a Cardan, lo injusta que ha sido su vida desde el día en el que nació, la mella tan profunda y oscura que dejó en él el hecho de crecer sin amor. Todo lo que le otorgaron fue desprecio, todo lo que conoció fue injusticia, creció rodeado de crueldad, ¿cómo iba a conocer algo distinto, entonces?
No lo justifica, pero lo explica. Su ansia de poder, de ser alguien más que un error dejado de lado por todo el mundo… es incluso irónico, ser un príncipe pero sentirte como un don nadie, ser tan prescindible. La impotencia, el miedo, el resentimiento dentro de Cardan lo transformaron en alguien cruel, malvado.
Su alarde de poder, entonces, no es más que una armadura con la cual se protege a sí mismo.
A pesar de todo esto, Cardan es divertido. Es inteligente y, en esta historia, es estable, sarcástico. Está herido en su orgullo por el engaño de Jude, le guarda resentimiento, es verdad, pero me ha gustado visualizar otra faceta de él, una más vulnerable y honesta.
‘’—No fui amable, Jude. No con muchas personas. No contigo. No estaba seguro si te quería o si quería que te alejaras de mi vista para que dejara de sentir como lo hacía, lo que me hizo aún más desagradable. Pero cuando te fuiste [...] me odié a mí mismo como nunca antes lo he hecho.’’
Otros personajes que tienen su participación en esta historia, nuevamente, son Locke y Tarryn, esta vez prometidos para casarse.
Ahora sí sacaré esto de mi sistema.
¿Qué clase de persona es Tarryn para aceptar que su novio enamore a su hermana gemela como una prueba de amor en el primer libro? ¿Es en serio?
Esta chica es una mala hermana. Desde el primer libro me ha parecido algo horrible por su parte el hecho de que elija una y otra vez a otras personas por encima de su hermana, alguien que siempre la elegiría a ella.
Jude es mejor que yo, evidentemente, porque la comprende. Pero, ¿ES EN SERIO? Me decepcionaron bastante las decisiones de Tarryn, que si bien es una chica dulce que ama a su hermana, me parece tan ingenua y conformista.
Pero a pesar de todo, la unión entre las tres hermanas, Vivi, Tarryn y Jude, puede llegar a ser realmente preciosa. Claro, aún así Tarryn me cae fatal.
Locke, por su parte, es un imbécil. Es el mayor idiota del mundo de las hadas, un descarado, un mujeriego y alguien simplemente repugnante. Su necesidad de llamar la atención, ser el centro de atención y crear polémica y drama para su propio deleite me dan ganas de…
Es un imbécil.
En fin, estos no son los únicos personajes que se dan a conocer un poco más en este libro. En The Wicked King pasan tantas cosas que no puedo detallar ninguna, todo sería spoiler y ninguna explicación le hace justicia a lo increíble que es este segundo libro.
Guerras están por venir, enemigos surgen y resurgen, sentimientos confunden a los personajes de la historia y Jude no es la única que tiene que preocuparse por mantener el poder. De hecho, ella deberá manejar nuevas preocupaciones, y con el final del libro, las cosas ciertamente podrían cambiar enormemente.
