Géneros: ciencia ficción, distopía, fantasía, romance
Páginas: 507
Sus habilidades casi le costaron la vida, y ella, ya no quiere esas habilidades. Pero ahora debe utilizarlas todos los días, para el gobierno. El mismo gobierno que la había encerrado en Thurmond, uno de los centros de rehabilitación más estrictos, ahora le otorga importantes y peligrosas misiones. Algunos la ven como su líder, siendo seguidores de ella, pero ella no se considera a sí misma como tal, de hecho, ella se ve como un monstruo.
Una de las misiones de Ruby será de guardar un explosivo secreto, y ella sabe que se deberá alejarse de la Liga Infantil y embarcarse en una misión muy terrible y peligrosa. La información acerca de la ENIAA, la enfermedad que causa las muertes, está guardada en un solo lugar. Liam Stewart, el chico que Ruby conocía, respetaba y amaba, ahora la protege, de una manera irreconocible. Ruby comenzará un viaje a través de Estados Unidos para poder encontrarle, divida entre sus viejos amigos y sus nuevas promesas.
Esta trilogía me recuerda un poco a ''Legend'' de Marie Lu, por ser un mundo distópico que se desarrolla en los Estados Unidos; y si bien las tramas son totalmente diferentes, ambas historias saben provocar reacciones similares: una adicción enorme, el estar constantemente esperando a que pase cualquier catástrofe y el aceleramiento de los latidos del corazón.
Bendigo el día en el que empecé a leer The Darkest Minds, porque estos libros no terminan de sorprenderme.
Never Fade empieza seis meses después de que Ruby se integrara a La Liga de los Niños. Liam se ha ido, sin recordar nada de Ruby; Chubs está muerto, o eso indican los seis meses de no saber si al final lograron salvarlo a tiempo; Zu se ha ido a California, y quién sabe si llegó sana y salva...
... y Ruby se ha convertido en un arma letal.
En Mentes Poderosas conocemos a Ruby como una chica algo rota. Ella estaba ciertamente viviendo su vida a través de un cristal, uno bien sucio y opaco, pero aún le quedaban fuerzas para escapar e intentar, aunque fuera con pocas esperanzas, buscar una vida mejor. Y tal vez, solo tal vez, permitirse pensar que era lo suficientemente fuerte como para proteger a quienes se permitió querer.
Pero en Never Fade... Ruby es otra persona. De hecho, todos han cambiado. De alguna manera, los sucesos vividos en Mentes Poderosas hicieron que algo terminara de romperse en los protagonistas para que, al final, estos se hicieran más fuertes... más fríos, de alguna manera.
Ruby ya no ''piensa'' que puede proteger a quienes quiere, ella lo sabe. Se ha convertido en una chica muy poderosa, peligrosa, entrenada... y aún así, está igual o más destrozada que antes. Ella ha aprendido cómo controlar el pánico, actuar, proteger, patear traseros y luchar, luchar, luchar... Pero el dolor sigue ahí. El pasado sigue persiguiéndola y el presente la atormenta.
Debo decir que me agrada mucho Ruby, siempre me han gustado las protagonistas fuertes, pero Ruby es más que eso. La forma en la que ama y protege, aunque no sea siempre de la mejor manera, es hermosa. Aunque ahora, en la Liga de los Niños, rodeada de personas en las que no confía, el silencio es una forma de protección para ella. Su ley vuelve a ser la misma desde que tenía diez años: sobrevivir, sobrevivir, sobrevivir.
Después de todo, La Liga de los Niños es sólo otro de los enemigos en ese mundo distópico. Otro lugar lleno de mentiras, igual que Thurmond, igual que East River.
Pero... tal vez, sólo tal vez, La Liga no siempre fue el enemigo, tal vez no lo era realmente.
Never Fade cuenta cómo Ruby ha cambiado y se ha convertido en alguien capaz de controlar a la perfección sus poderes. Como miembro de la Liga, ella es asignada a varias misiones importantes. Cosas que la hacen más fuerte y otras que la destruyen, así como otras que pueden cambiar la vida de todos los niños con facultades para siempre, como encontrar un dispositivo que contiene las respuestas que han estado buscando desde hace tanto tiempo: la causa de la ENIAA.
Así que esta misión, en la que se centra el libro, nos lleva a unos cuantos ataques cardíacos, más de un grito desesperado y ¡AH SI!, cómo olvidarlo, sollozos y lágrimas.
Este libro me arruinó mis sueños de arcoíris y mariposas. Y lo amo, lo amo, lo amo, lo amo.
Una de las mejores cosas de Never Fade, a parte del poder que tiene para hacerte acostar a las 5:00 AM y levantar a las 8:00 AM, son los nuevos personajes.
Jude es simplemente perfecto. Amé el cómo ha vivido en un mundo que insiste en destruirlo, y aún así él sigue buscando lo bueno que queda de ese mundo. Él brilla tanto, tiene tantos demonios y sigue siendo tan capaz de mostrarse más fuerte que cualquiera. Más vivo, más alegre, con más capacidad de expresar lo que siente.
''-Encantado de conocerte -dijo-. ¿Acabas de volver? ¿Has estado en Virginia todo este tiempo? Cate dijo que os separaron y que estaba muy preocupada por algo que...
El chico no terminaba una palabra antes de comenzar la siguiente. Parpadeé, tratando de zafarme de su abrazo.
-Judith, parece que tu novia ya tiene bastante de tus achuchones -dijo alguien en voz baja en algún lugar más allá de su hombro-. Afloja.''
Vida... amo su personalidad sarcástica. Las chicas duras son de lo más Kul con K. La amarán también, a pesar de actuar como una maldita al principio, esta chica es demasiado genial.
''-Mientes más que hablas. ¿Crees que simplemente vamos a largarnos contigo con la puesta de sol de fondo?
-No -dijo Vida-. Además, espero que lo hagan haciendo cabriolas, y con una puta sonrisa en la cara y la menor cantidad de idioteces posible.''
¿Y Liam?
''-Estoy... Es... Es como una tortura. -Tenía la voz cansada, apenas era un susurro-. Creo que me estoy volviendo loco. No sé qué está pasando, lo que sucedió, pero te miro a ti, te miro y te amo tanto. No por algo que hayas dicho o hecho, ni por nada en absoluto. Te miro y sencillamente te amo y me aterra. Me aterra lo que yo haría por ti. Por favor... debes decirme... dime que no estoy loco. Por favor, solo mírame.''
Readers, agregen a Alexandra Bracken a la lista de autores que quieren cortarte profundamente en la piel, y luego bañarte con limón y sal. La adoro.