Páginas: 281

Géneros: young adult, romance

Como he dicho anteriormente, tengo esta costumbre de leer libros sencillos y bonitos cuando termino uno que me destruye completamente o me convierte en una adicta. Algo así como clavo que saca otro clavo. A tu Lado de Kasie West fue ese suave y cómodo colchón que tanto necesitaba después de leer Cruel Beauty de Rosamund Hodge. 

Y créanme, es de mis colchones favoritos. 

Hace muchos años leí un libro de esta autora llamado The Distance Between Us, y recuerdo que me gustó muchísimo. Por ello, desde que adquirí A tu Lado supe que también me gustaría. La razón por la que lo podía afirmar era porque Kasie es de esas autoras cuya escritura está destinada a sacarte una sonrisa. Sus historias son fáciles de leer, fluidas e interesantes. ¡Además de súper bonitas! 

Eso es exactamente lo que me ha parecido este libro, súper bonito y dulce como un algodón de azúcar. Me ha gustado muchísimo. 

Autumn es estudiante de último año. Es divertida, simpática, amigable y le encanta la fotografía. También, tiene un flechazo por uno de sus mejores amigos, Jeff, a pesar de que cada vez que están juntos la hace hacer cosas que nunca haría, como tirarse por una rampa en silla de ruedas. 

Sin embargo, si bien Autumn prefiere la calma que la loca vida al límite que persigue Jeff, no puede evitar sentirse atraída por él. Tampoco puede negarse a sus locuras, o a cualquier petición de sus amigos, porque Autumn es una chica excesivamente complaciente. 

Me detendré aquí. 

Me ha gustado muchísimo la personalidad de Autumn. De hecho, puedo identificarme mucho con esta chica, o más bien, puedo entenderla. Es una persona muy dulce y alegre, me hizo reír mucho con su forma de pensar. Sin embargo, piensa demasiado las cosas debido a inseguridades, muchas veces ridículas, que solo están en su cabeza. Autumn tiene un miedo inmenso a decepcionar a las personas, principalmente a sus amigos. Es bondadosa sin tener que intentarlo, pero se siente horrible al pensar que puede hacerle daño a alguien, o que los demás la van a juzgar o tratarla diferente por sus acciones, y esas dudas destructivas la llevan a intentar hacer feliz a todos los demás, aunque eso signifique que ella no será feliz. 

Esa preocupación por el 'qué dirán' o el 'qué pensarán de mí' puede ser tan tóxica para las personas, pero una vez empiezas es difícil quitar esos pensamientos de tu mente. Autumn es exactamente así, segura de que si da un paso en falso entonces puede recibir la espalda de sus amigos. 

Es imposible controlar la opinión externa que generaremos de nosotros mismos, por lo que intentarlo siquiera puede traer mucho estrés y decepción en la vida, podemos incluso reprimir nuestras opiniones para satisfacer al otro, lo cual nos aleja de la gente e impide que alguien ciertamente pueda conocernos por quienes somos. 

Autumn, en su afán por no molestar a nadie, incluso ha preferido ocultarle a sus amigos información importante y delicada sobre sí misma. Sin embargo, Autumn no se enfoca en lo autodestructivo de sus decisiones, y si bien a veces se vuelve difícil vivir en su piel, es una chica muy alegre y fuerte. Nunca le ha faltado amor, y tampoco lo niega a nadie. 

Considerándolo detenidamente, su vida es bastante buena… 

…hasta que se queda encerrada en una biblioteca por tres días. 

Desesperada y asustada la noche en la que sus amigos se van sin ella a una fiesta, dejándola encerrada en la inmensa y solitaria biblioteca de su ciudad, Autumn no puede más que esperar a que sus amigos y familia la empiecen a buscar. 

Debido a las festividades y porque es viernes, Autumn sabe que no saldrá pronto de allí, por lo menos no hasta después del fin de semana. Estar sola puede ser lo peor para ella y su creciente pánico.

Pero entonces resulta que no está sola. 

Dax no es precisamente el chico más dulce de la tierra, por lo que cuando Autumn se da cuenta de que quedó atrapada con su compañero de instituto, un chico conocido por pasar una parte de su vida académica en un reformatorio de menores, ahora sí puede aplicar la frase de ''ya nada puede ir peor''. 

¿Puedo entonces empezar a decirles que amo a Dax? Bueno, amo a Dax. Lo amo. 

Si la frialdad fuera una persona, ese sería Dax. Es tan cruel con Autumn, llamándola rica y malcriada, y tan reservado. Autumn prácticamente tiene que sacarle las palabras a golpes, lo cual inmediatamente evidencia lo distante y poco confiado que es. 

Si alguien ha sufrido mucho en este libro, ese ha sido Dax. Su vida nunca ha sido fácil, no ha hecho más que enseñarle lo mentirosas e innecesarias que pueden resultar las personas. A veces es mejor estar solo, eso es lo que piensa. Así que cuando Autumn inicia este intento de amistad, Dax se encuentra a sí mismo empujándola lejos y después cerca. 

El carácter de este chico, su inteligencia silenciosa, lo dulce que podía llegar a ser simplemente con sus acciones a pesar de su frialdad, y la incapacidad de abrir su corazón atormentado… lo he amado en cada página. 

Debo decir que lo que más me ha gustado de toda esta historia ha sido la evolución de la relación entre estos dos personajes. Sería tan irreal que un chico tan destruido emocionalmente como Dax fuese capaz de dejar entrar a Autumn en su vida rápida y fácilmente, por lo que me alegró tanto que la autora se tomara su tiempo y sus páginas para llevar a estos dos en una hermosa travesía de desconocidos, hasta una amistad realmente preciosa, y finalmente el amor. 

‘’—Lo sé. No quieres tener ningún vínculo —respondí. Tendría que probar algo diferente con él si quería su amistad. 

—Yo no tengo ninguno. Me preocupa que tú sí. 

—Yo no tengo vínculos. —Solté un suspiro burlón—. Solo eres una buena distracción para mí. Necesito una distracción. —Eso podría funcionar si lograba controlar la expresión de mi rostro. 

[…] 

—¿Amigos? 

—No. Los amigos son vínculos, ¿cierto? Así que no, somos distracciones. Amigos distraídos. 

—De acuerdo. —Se detuvo, con expresión divertida. 

—Y los amigos distraídos no se besan. —¿Por qué no podía dejar de hablar?—. Los chicos se involucran cuando me besan. 

—Sin besos entonces. —Una verdadera sonrisa ocupó su rostro. Su voz era baja y áspera y quería arrojar mi regla por la ventana de inmediato. La única regla que sabía que me protegería del trato que acababa de hacer.’’ 

Es de las historias más bonitas que he leído últimamente. Tan tierna, romántica, interesante... me mantuvo enganchada cada página. Es una lectura sencilla para leer rápidamente, sin que ello implique imperfección. Me ha encantado, simplemente.