Hace tiempo que Ivy Morgan no es la misma de siempre. Y es comprensible. Que te secuestre el príncipe de los faes, un psicópata empeñado en abrir las puertas del Otro Mundo, es lógico que te quede algunas secuelas psicológicas. Pero no se trata solo de eso. Algo oscuro y dañino se está propagando por su interior, algo más poderoso de lo que la propia Ivy podría imaginar… y que se interpone entre ella y Ren Owens, el miembro de la Orden del que está locamente enamorada.

Ren haría cualquier cosa por mantener a Ivy a salvo. Lo que fuera. Sin embargo, cuando toma una decisión trascendental por ella, las consecuencias son de tal magnitud que amenazan con destrozar las vidas de ambos.

Aunque se siente dolida y traicionada, si Ivy quiere salir con vida, debe dejar de lado sus sentimientos y colaborar no solo con aquellos a los que ama, sino también con un enemigo al que preferiría matar antes que depositar su confianza en él. Se avecina una guerra, y pronto se hace evidente que todo lo que Ivy y Ren creían saber de la Orden no era más que un puñado de letales y peligrosas mentiras.

Para salvar a aquellos a quienes ama, y también a sí misma, Ivy sabe que no le bastará con ser valiente.

Porque, detrás de todo malvado príncipe, hay una reina…

Ni siquiera tengo palabras para explicar este libro. Pasaron tantas cosas, cambiaron tantas cosas, lo que creíamos que sabíamos en un principio cambió completamente… 

Valiente es definitivamente una caja de sorpresas. Ha sido mi libro favorito de toda la trilogía, y ya les comenté que el giro que tomó Semihumana me encantó. Pero es que Valiente se lleva el premio con todos esos giros inesperados en la trama. 

Los chicos están ocultos en el ‘’Hotel de Faes Buenos’’, como llama Ivy al lugar en el que se oculta del príncipe fae psicópata que la quiere… bueno, embarazar y usar al bebé apocalíptico para destruir, a largo plazo, a toda la humanidad. 

Metas de la vida.  

Después de ser secuestrada por el príncipe y estar a su merced durante semanas, Ivy ha cambiado. Nunca fue una chica demasiado alegre ni llena de vida, a mi parecer, pero es evidente que en Valiente Ivy no es la misma de antes. Desde el inicio del libro vemos a una chica llena de miedo y furia contenida, decepcionada de todo: su mejor amiga, la vida normal que nunca ha podido vivir, la tortura a la que fue sometida por un príncipe que, además, torturó al amor de su vida. 

Ivy está algo vacía, algo destruida, por lo que en gran parte de este libro nuestra valiente Ivy ahora es una cascarón de lo que solía ser. Su manera de manejar todos los errores y toda la carga que lleva encima es a través de la soledad. Se ha retraído en su propio mundo, alejándose de los demás, ocultándose en su propio ser. 

Y eso te rompe un poquito el corazón. 

‘’—Ivy. —Hizo una pausa y pude notar su intensa mirada sobre mí—. Te echo de menos. 

—Estoy aquí mismo —respondí, intentando reprimir un repentino ramalazo de irritación. No debía sentirme molesta con él. Ren no estaba haciendo nada malo. Inspiré hondo y me obligué a sonreír—. No tengo otro sitio adónde ir. 

—Estás aquí, cariño. —Aunque empleó un tono suave, me estremecí al oírle emplear aquel apelativo. Debería haberlo sabido. Cuando el príncipe se hizo pasar por Ren, nunca me llamó así—. Estás aquí físicamente, pero eso es todo.’’

Debo decir que, a pesar de la crisis emocional que está viviendo Ivy al inicio de Brave, es evidente cómo esta chica ha madurado. Me encanta eso de los libros de Jennifer, ella sabe como hacer crecer a sus personajes a lo largo de la historia. Lo mismo pasa con Katy en la saga Lux, con Alex en Covenant, y ahora con Ivy. Tengo que admirar eso. 

Nuestros chicos están buscando la manera de derrotar al príncipe, pero este está cada vez más cerca de lograr su cometido y abrir los portales del otro mundo de manera permanente, lo cual implica el fin de la humanidad. Así, los chicos corren contra reloj para encontrar una manera de detenerlo. 

Pero resulta que no es tan fácil como pensábamos. 

Cuando las cosas se complican al nivel DIOS, y cuando digo nivel Dios créanme que hablo enserio, tanto los protagonistas de esta historia como nosotros, los lectores, nos adentramos en un laberinto sin fin para comprender lo que está pasando. 

Se los juro, si pudiese describir este libro con un gif sería con este: 

Todo cambia. 

Ivy cambia, literalmente. 

Los enemigos cambian, literalmente. 

Los aliados cambian. 

El objetivo cambia. 

NADA es lo que parece ser. 

Bueno, si hay algo que no ha cambiado es lo genial que es Tink. 

‘’—¿Qué pasa entre Ren y tú? —me preguntó en cuanto salimos al pasillo—. ¿Tú eres el motivo por el que casi me arranca la cabeza esta mañana cuando le dije que estaba hecho un asco? Porque parecía que hubiera salido malparado de un rodeo. 

Me detuve, cruzándome de brazos. 

—Ni siquiera quiero saber qué significa eso. 

—Pues significa que te fo… 

—Tink —lo corté—. No te pedí que salieras para hablar de Ren. 

—Pero yo quiero hablar de él. Casi ni os dirigisteis la palabra ahí dentro. Fue muy raro. 

—Ya lo sé. Anoche nos peleamos, pero no pasa nada. Todo se arreglará. 

—¿Qué? —Su expresión se tiñó de preocupación—. ¿Fue una pelea de las gordas? ¿O de las pequeñas? Ay, Dios mío, ¿vais a romper? ¿Con quién voy a vivir? 

—¿Que con quién vas a vivir? —Me lo quedé mirando, atónita—. No tienes doce años ni eres nuestro hijo. 

—Pero necesito que me cuiden. Que me quieran. Necesito una cuenta de Amazon Prime.’’

No me cansaré de decirlo: esta trilogía me ha gustado muchísimo más de lo que realmente esperaba que me gustara en un principio. Incluso Ren, que al principio no me enamoró demasiado, para este libro ya me ha tenido enamoradísima. Es un amor, su ternura no tiene límites. 

De verdad, si les gusta esta autora, si les gusta la fantasía y el romance (y también el new adult porque hay muchas escenas bastante eróticas en esta trilogía), entonces deben darle una oportunidad a este mundo lleno de hadas malvadas, duendes, cazadores de hadas y príncipes lunáticos. 

Leánla y fangirleen (sé que no es una palabra pero lo que sea) conmigo, por favor. 

SPOILER

Okay, no acostumbro a hacer esto pero… ¿qué demonios con ese final? La reina se fue pitando y, ¿listo? ¿ahí acabó? Les juro que me hubiese dado un ataque de no ser porque Jennifer escribió tres libros más de la historia, porque necesito un cierre. 

Siento que hubo muchas cosas que no quedaron claras. ¿Qué demonios con la reina? ¿Quiénes eran esos faes que iban directamente donde Ivy y se mataban ellos mismos antes de que ella los matara? Nunca explicaron eso. ¿Y la esposa de David? No que me importe, pero ¿qué pasa con ella? 

Uff, necesito leer los demás libros ya. Además, ¿desde el punto de vista del príncipe Caden? Ya estoy emocionada, estoy segura de que la historia será increíble. Espero volver a ver a Tink, estoy obsesionada con ese duende. 

‘’—T-Tink, ¿por qué… estoy…? 

—¿Atada como si estuvieras participando en un pervertido juego sado? —Se inclinó hacia delante, con cuidado de no molestar a Dixon—. «Los Lannister te mandan recuerdos.»’’

El mejor.